Mientras el sueldo se estanca, el taxi sube

Después de unos meses de haber aumentado el boleto del colectivo, los rosarinos podrían volver a sufrir un nuevo golpe al bolsillo. Se trata del incremento de la tarifa del taxi. El próximo jueves la iniciativa podría tratarse en el palacio vasallo, dando lugar a un debate con diversas opiniones de la oposición y la segura aprobación de los Concejales del partido Socialista.

El ejecutivo local presentó el jueves pasado un proyecto que establece un aumento del 15.5% para este mes y un 5% para el mes de noviembre. De todas maneras, la cuestión podría haber sido peor, ya que los peones de los taxis reclamaban un incremento del 30%.

Lo interesante sería saber si con este ataque al bolsillo, el servicio público mejorará sus condiciones, ya que las principales quejas no son detalles menores

A la gente le gustaría, ya que el servicio es caro, que llegue a tiempo, que haya más coches disponibles, que no se queden solamente en el nuevo casino y que trabajen las horas establecidas. Estas son las quejas más comunes que recibe diariamente el servicio público de la ciudad, las cuales siguen siendo las mismas desde hace ya mucho tiempo.

Sin ir más lejos, no hace más de dos semanas atrás, más de 50 taxistas fueron multados por no trabajar las horas que debían hacerlo. La ciudad cuenta con 3.600 coches y el 50% está obligado a trabajar las 24 horas. Luego de dos semanas de dicho acontecimiento se tratará el aumento de la tarifa, suena contradictorio pero es así.

Esta es otra maniobra del gobierno que se pone a los rosarinos en contra por otro golpe al bolsillo. No hay que olvidar que la gente todavía protesta contra el aumento del boleto del colectivo, por el servicio de recolección de basura, por los baches en las calles, por la ausencia de cloacas, entre otras cosas.

Sería de total agrado que el dinero recaudado se utilice para solucionar los principales problemas que afronta la ciudad y no para construir por ejemplo un puerto de la música.

Es inexplicable (no solo en Santa Fe, sino en todo el país) que un chofer de colectivo o de taxi, gane más dinero que un maestro o un medico, ya que estos últimos están para educar y salvar las vidas de las personas, sin menospreciar el trabajo del chofer.

Claro está que los que pagan las consecuencias de las malas políticas utilizadas, son los ciudadanos, ya que ahora por sólo subirse a un taxi, el rosarino deberá abonar al rededor de cinco pesos.

Emanuel Bernad

El tren bala cada vez más rápido

Hace ya cuatro años que el ex presidente Néstor Kirchner lanzó un proyecto sobre la construcción del tren bala que uniría las ciudades de Rosario- Córdoba y Buenos Aires. Al momento de hacer pública la iniciativa, la noticia no cayó del todo bien en la sociedad que respondía a este acto al grito de “no al tren bala, sí al ferrocarril”.

Después de dichos acontecimientos, dio la sensación que el proyecto quedó estacionado a futuro, lo cual no sucedió. Durante estos años de a poco el proyecto fue ajustándose a modificaciones económicas que el gobierno tuvo que afrontar para volver a activar el crédito. Hoy en día el canje de la deuda y la estabilidad económica con la que cuenta Argentina con 50.000 millones de dólares en reservas hace que se pueda financiar la obra.

Después de cuatro años, se activa nuevamente el financiamiento y se hace más fuerte la posibilidad de que la iniciativa llegue al congreso.

Pero lo que en realidad la gente pretende es un tren que sea para todos, un tren que una a los pueblos olvidados con las grandes ciudades a un costo accesible. Además con el gasto que significa afrontar el tren bala se podrían hacer cosas que hoy en el país son prioridades. La educación está atravesando una crisis económica muy fuerte, las rutas más importantes que conectan las ciudades están en un estado deplorable, los jubilados son cada vez más pobres, el desempleo sube cada vez más y la marginación está implantada en la sociedad.

Ante esta idea, el ferrocarril estatal se financiaría en un menor costo, ya que el gasto sería afrontado por el mismo país y sería una inversión para la inclusión y la creación de industrias ferroviarias, creando así más puestos de trabajo. Mientras que el pueblo reclamó un proyecto más equitativo para todos, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que “es un paso de modernización muy importante para la nación”, sin importarle las verdaderas necesidades que afronta el Estado argentino.

Frente a este caos que viven los habitantes de los pueblos que se les hace casi imposible afrontar el gasto de un micro que los derive a las ciudades, se creó un contraproyecto que estable el tren para todos los argentinos. Distintas agrupaciones trabajan diariamente para llevar a cada rincón del país la iniciativa que sería oposición al proyecto oficialista.

Con la llegada del tren bala, el gobierno dejaría de lado la idea de distribución, ya que si se aprueba el proyecto, las únicas ciudades que contarán con el beneficio son Rosario, Córdoba y Buenos Aires, mientras pagarían los costos el país entero.


Emanuel Bernad.

"Tenemos que garantizar la calidad de vida de los ciudadanos de Rosario"

El concejal por el Partido Socialista, Pablo Colono contó en la entrevista como trabajó hasta el momento desde el concejo de la ciudad. Destacó los méritos de su bloque y relató cuales fueron las ordenanzas más importantes que impulsó desde su banca. Aclaró que su meta como concejal es "garantizar la calidad de vida de los ciudadanos".

Colono preside la comisión de Ecología y desde ahí impulsó varias ordenanzas. El y su equipo están involucrados en otras comisiones como las de derechos humanos y diversidad sexual. Contó que hace tres años atrás presentó un proyecto de derecho a la pensión de parejas del mismo sexo. Destacó que fue un buen avance porque si una de las dos personas de la pareja fallecía, el otro contaba con una pensión mensual. "Rosario fue una de las primeras ciudades en avanzar sobre este tema", exclamó el concejal.

En función de ese proyecto, impulsó la creación del paseo de la diversidad, que mostraba a Rosario con una actitud de apertura, con intenciones de entender la situación y contemplar a las minorías sexuales. Gracias al desarrollo de estos temas, Colono logró impulsar la creación del área de diversidad sexual. El edíl destacó: " Gracias a esto, el pensamiento de la diversidad sexual es una política pública, como lo es el área de la mujer y el de la niñez.

También contó que lograron que los soldados ex combatientes de Malvinas, tengan una jubilación opcional adelantada, para aquellos veteranos de guerra puedan jubilarse con anticipación. "Esta fue una propuesta del centro de ex soldados combatientes en conjunto con nuestro bloque", aclaró el concejal.

Otra ordenanza motivo de muchas discusiones, que hoy en día está instalada en la agenda Nacional, fue la del protocolo de aborto no punible. Esta también fue una iniciativa del bloque socialista, en conjunto con organizaciones de género de todo Rosario. Colono resaltó que fue una ordenanza muy debatida pero finalmente aprobada.

Luego del receso invernal que atravesó el concejo de la ciudad, el edil tiene intenciones de presentar una campaña de juegos y juguetes no sexistas. "Para que no se estereotipe el tipo de juego entre los niños", sostuvo el concejal. Dejó en claro que lo que busca esta campaña es la integración social.

También contó que impulsó la realización de varios foros sobre derechos humanos, ecología y demás. Formó parte de homenajes, como el de Salvador Allende, organizado con chilenos residentes en la ciudad.

Al momento de hablar de los problemas más preocupantes de la ciudad, sostuvo que el servicio de transporte público tiene muchos inconvenientes, pero que no solo vienen de Rosario sino de la Nación. Reclamó que la ciudad no recibe los subsidios necesarios porque la mayoría de ellos quedan en Capital Federal y el Gran Buenos Aires.

Colono destacó que la meta de él como concejal y también de su partido en conjunto es "generar acciones que posibiliten un mejoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos de Rosario".

Emanuel Bernad.